Para conocer
Las cataratas
Son el principal atractivo del parque. Justo en el límite con Brasil, el Río Iguazú se desploma en más de 270 saltos y cascadas creando un espectáculo natural que deja sin aliento. Una serie de pasarelas permite llegar hasta los saltos atravesando los brazos del río y la selva, y conforman los tres circuitos principales: el Paseo Inferior, el Paseo Superior y la Garganta del Diablo. Estos circuitos se pueden conectar a pie o a través de un tren ecológico que conduce al inicio de los senderos y las pasarelas.
Se pueden contratar salidas en gomón y en lancha que remontan el río hasta la base de las cascadas para sentir la fuerza increíble de los saltos (es importante llevar piloto o capa impermeable durante esta actividad). Si se prefiere navegar con más calma, hay paseos embarcados por el Iguazú Superior, con la posibilidad de observar la flora y fauna de la región.
Si el viaje coincide con los días de luna llena, es posible disfrutar las pasarelas, los saltos de agua y los ruidos de la selva a la luz de la luna. Es una experiencia única que debe reservarse con tiempo.
Sendero Macuco
El Parque Nacional protege 55 mil hectáreas de selva paranaense, la ecorregión con la mayor biodiversidad de la Argentina. Acá viven yaguaretés, tapires, monos, tucanes y especies que no se encuentran en ninguna otra parte del país.
Macuco es un sendero imperdible para sentir la magia de la selva, con un recorrido de 6 km ida y vuelta hasta el salto Arrechea. Andá a primera o última hora y en silencio para tener más chances de ver animales. Recorrerlo junto a un guía especializado te permitirá descubrir muchas más cosas de las que tus ojos pueden ver.
Ruta Escénica 101
Además de visitar las cataratas, se puede recorrer un tramo de la ruta nacional 101 que circula por el corazón del parque nacional. Atraviesa la selva y permite llegar al pie de altísimos palos rosa y, con suerte, ver animales silvestres. También hay un mirador para observar aves.
Es importante circular a muy baja velocidad para disfrutar la experiencia y evitar atropellamientos de fauna. Este recorrido también se puede hacer en bici con prestadores locales. Al ser una ruta de tierra, es importante preguntar sobre el estado del camino antes de recorrerla.
Puerto Iguazú
Tanto Puerto Iguazú como las localidades vecinas ofrecen alternativas para complementar la visita al parque con propuestas de turismo aventura, senderismo, reservas naturales privadas, centros de rescate de fauna silvestre y la posibilidad de conocer la cultura de varias comunidades Mbya guaraní.
En la zona que se conoce como Reserva Selva Iryapu (o 600 Hectáreas), que forma parte del ecosistema del Parque Nacional Iguazú, se encuentran varios complejos hoteleros y lodges de jerarquía internacional. Rodeados de árboles de más de 400 años y con una visión de sostenibilidad, permiten disfrutar de caminatas con guías asistidos, participar en festejos de la comunidad Guaraní y observar aves en la inmensidad de la Selva Misionera.
También se puede visitar el Hito Tres Fronteras, la costanera sobre el Río Iguazú, el único jardín de picaflores de la zona, el Salto en Mbocay y el Salto del Turista. Algunas agencias locales organizan excursiones y salidas en bicicleta. Gûira Oga es otro lugar interesante para conocer por ser un refugio de animales silvestres en proceso de rehabilitación.
Parque Nacional do Iguaçú en Brasil
El lado brasileño del parque complementa la visita a las cataratas con una perspectiva diferente. Se dice que del lado argentino se está "adentro" de las cataratas, y del brasileño se tiene una vista panorámica.
El parque está a pocos kilómetros del cruce de frontera y se puede llegar en auto o con excursiones contratadas. Un bus turístico conecta el centro de visitantes en la entrada del parque, hasta el inicio del sendero que se recorre a pie (1 km) y finaliza en una pasarela de observación que regala una vista impresionante.