De Ciudad de Mendoza a San Rafael

El viaje empieza en la capital de Mendoza, una ciudad con más de 50 mil árboles, plazas, parques y las pintorescas acequias que transportan el agua de los ríos que bajan de las montañas. Es también el centro cultural, artístico y educativo de la región.

Vale la pena recorrer el Paseo Peatonal Sarmiento con sus pérgolas, canteros con flores, comercios y bares, y el Parque General San Martín al que se ingresa por unos imponentes portones de estilo francés donde hay esculturas, fuentes de agua, grandes espacios verdes y un lago. Además, la ciudad cuenta con el Museo de Sitio y Centro de Interpretación Casa de San Martín que permite entender la ruta sanmartiniana que se desarrolla en gran parte de la provincia.  

En los alrededores están las localidades de Las Heras, Luján de Cuyo y Maipú donde hay bodegas para visitar y empezar a disfrutar de los Caminos del Vino. Un dato: todos los años se realiza la Fiesta Nacional de la Vendimia durante el mes de febrero. Otro atractivo de esta zona es la Ruta del Olivo donde se pueden probar los aceites de oliva más ricos de la región y visitar las plantaciones más antiguas del país.

Más información de qué hacer en la ciudad en este link.

A orillas del río Mendoza y en medio de la precordillera de Los Andes, Cacheuta es un paraje montañés con aguas termales entre los 28 y 40°C. Están dentro del Parque de Agua Termal que cuenta con quinchos, parrillas, restaurante y proveeduría para pasar el día, y para quienes quieran redoblar la apuesta del relax, hay un hotel con spa. A pocos metros está el Puente Colgante peatonal con 140 m de largo que conecta las construcciones del pueblo a ambos lados del río con hermosas vistas panorámicas.

Siguiendo por la RP 82 y entre montañas de distintas alturas, se llega al dique embalse Potrerillos. Las propuestas de turismo aventura en su espejo de agua son muchas: kayak, windsurf, canopy, cabalgatas, trekking, paseos en velero, pesca con mosca, escalada, avistaje de aves y en el río Mendoza también se hace rafting. Hay alojamientos, campings y restaurantes.

A partir de acá, la RN 7 pasa por 13 túneles que atraviesan la montaña. A la derecha, el río Mendoza acompaña el recorrido. Después del segundo túnel, aparecen las vías por las que pasaba el Ferrocarril Trasandino que llegaba hasta la ciudad de Los Andes en Chile.

Uspallata es un buen lugar para hacer base y recorrer la alta montaña mendocina. Tiene un centro comercial con hoteles y restaurantes. Es un pueblo histórico porque fue testigo del paso de las columnas del Ejército del Libertador San Martín durante las guerras de independencia. Uno de sus atractivos son Las Bóvedas de Uspallata, un lugar construido en el siglo XVIII que fue utilizado para la fundición de las armas del ejército de los Andes. 

A 7 km y sobre la RP 52, se puede conocer el Parque Municipal Arqueológico Cerro Tunduqueral que reúne el conjunto más relevante de petroglifos reportados en la región hechos por las culturas agroalfareras en tiempos prehispánicos. A 25 km y también sobre la RP 52, hay un antiguo asentamiento minero llamado Paramillos que fue descubierto por españoles y jesuitas en el siglo XVII. Hoy se pueden explorar sus galerías subterráneas y conocer sus historias y misterios a través de un trekking que puede incluir rappel y tirolesa.

​​En invierno, Los Penitentes se visten de blanco para practicar actividades deportivas en sus pistas de ski. El resto del año se puede pasear por la villa turística, subir en aerosilla para mirar el paisaje desde los cerros, alquilar bicicletas y hacer descenso en el Bike Park, caminar, escalar y cabalgar.

Una parada obligada para sorprenderse con las obras de arte de la naturaleza. Este puente natural sobre el río Cuevas se formó hace millones de años por efecto de la erosión, y su alto contenido de azufre crea tonalidades naranjas, amarillas y ocres espectaculares. Forma parte del sistema vial andino “Qhapaq Ñan” y es Patrimonio Mundial por la UNESCO.

Uno de los destinos de montañismo más importantes del mundo. En plena cordillera, concentra cumbres de más de 6 mil metros y la montaña más alta de América, el cerro Aconcagua, con 6962 msnm. Hay senderos autoguiados, rutas de trekking y miradores para contemplar los Andes. Se puede visitar de noviembre a abril. Uno de los senderos más recomendados dentro del parque es el circuito Laguna de Horcones. Este espejo de agua glaciaria inseparable del cerro Aconcagua es parte de un pequeño humedal formado por 5 lagunas con gran diversidad de plantas y animales. Distancia: 4 km (ida y vuelta). Tiempo: 2 hr.

Después de cruzar el último túnel se llega al paraje Las Cuevas. Se pueden ver las viejas instalaciones del Ferrocarril Trasandino y las Casuchas del Rey, unas construcciones del siglo XVIII que sirvieron como postas del Correo Real y refugio de viajeros. Hay hospedajes, restaurantes y una proveeduría. La Quebrada de Matienzo es un paraíso en medio de la montaña. Se accede desde Las Cuevas y se pueden ver glaciares, ríos, humedales, sitios arqueológicos y 100 especies de aves. Es una zona ideal para practicar senderismo y mountain bike. Desde Las Cuevas asciende un camino vehicular de 8 km hasta el famoso Cristo Redentor a 3850 metros en el límite con Chile. Es un gran punto panorámico para terminar esta primera parte del recorrido. Desde acá se regresa por la RN 7 hasta la RN 40, para luego continuar por la RP 86 hacia Tupungato.

​​14 km antes de llegar a Tupungato, está el acceso al Cristo Rey del Valle. Desde el mirador se puede ver todo el Valle de Uco, el Cordón del Plata y el volcán Tupungato, la segunda montaña más alta de Mendoza después del Aconcagua.

​​En esta parte del recorrido se unen las dos regiones vitivinícolas más importantes de la provincia: Luján de Cuyo y Valle de Uco. Por eso Tupungato es la ciudad ideal para combinar gastronomía, vinos y naturaleza. Su oferta de experiencias es variada: días de campo en estancias, astroturismo, bici, trekking y cabalgatas en la alta montaña.

Este fue el escenario de una de las históricas rutas del Ejército de los Andes. Hoy es una Reserva Natural de unas mil hectáreas que protege el Monumento Retorno a la Patria del General San Martín en memoria de su paso por esta tierra en 1823. El paisaje es muy pintoresco: frondosas arboledas autóctonas, arroyos cristalinos, quebradas y el Cordón del Portillo con sus picos nevados. En la zona se puede hacer parapente, trekking, ascenso y escalada en roca, cicloturismo y pesca deportiva. Hay restaurantes, proveedurías, un camping y una hostería. Puede visitarse durante todo el año. Si se sigue 14 km por la RP 94 de ripio se llega hasta el Cajón de los Arenales, la “meca” de los escaladores, con unas 150 vías de escalada de distintos grados de dificultad. Si no se va a escalar, desde el ingreso al cajón se puede hacer un trekking corto de 20 min a pie que bordea un arroyo y llega hasta un refugio. Para ingresar a esta zona, hay que registrarse previamente en el Refugio Portinari de Gendarmería.

Localidad con alojamientos, todos los servicios y bodegas que incluyen visitas guiadas y degustaciones. A unos 12 km del centro se llega al dique Valle de Uco.

Es el departamento más antiguo de Mendoza. Fundado en 1772, cuenta con una gran riqueza histórica, cultural, arqueológica y paisajística. Se puede hacer trekking, cabalgatas, rafting, mountainbike, escalada, safaris fotográficos y pesca deportiva. Hay alojamientos, servicios y bodegas con visitas guiadas y degustaciones.

Este Parque Municipal es muy particular: está en una zona desértica, hay lechos secos de ríos, cañadones tallados por el viento y las lluvias, y muros de arcilla y arena de más de 40 m de altura. Se puede ir a pasar el día o contratar una excursión para recorrerlo en bici o a pie (la municipalidad organiza caminatas de luna llena imperdibles). También se hace rappel y avistaje de flora y fauna.

Localidad con alojamientos, gastronomía y todos los servicios. Desde acá se puede seguir viaje hacia el Dique Agua de Toro, el volcán Diamante, la Reserva Natural Laguna del Diamante y las termas de El Sosneado.

Ciudad con alojamientos, gastronomía y todos los servicios ubicada sobre el río Diamante. El Canón del Atuel, a 40 km de San Rafael, es uno de los lugares más buscados para hacer rafting: las aguas caudalosas y agitadas del río Atuel pueden disfrutarse durante todo el año. Otros diques y embalses para visitar son: El Tigre, Los Reyunos, Valle Grande y El Nihuil. En la zona también se practican otras actividades de aventura como mountain bike, trekking, windsurf, kayak, pesca, buceo, cabalgatas, parapente y rappel. A solo 20 km de San Rafael se puede conocer la antigua Villa 25 de Mayo, famosa por sus riquísimas tortafritas. El viaje puede coronarse con visitas a bodegas y con recorridos por fábricas productoras de aceites de oliva. Vale la pena quedarse unos días.

+ info: https://sanrafaelturismo.gov.ar/turismo/